HACIENDA

Este término se ocupó en los virreinatos de la Nueva España, la Nueva Galicia y el Perú cuando se referían a las "haciendas de ganado", "haciendas de caña de azúcar", "haciendas de ovejas", "haciendas de carros y recuas" entre otras. Como la religión era un factor predominante en la época virreinal los dueños ofrecían la gratitud de sus bienes a un santo o a María Madre en sus diferentes advocaciones y despues anexando alguna característica del sitio para no confundir el conjunto con alguna otra hacienda consagrada al mismo santo "patrón"

INMUEBLE

El origen formal se remonta a edificaciones similares de España, en especial a los cortijos andaluces, con la característica de sucesión de patios de ventilación. Las haciendas eran edificaciones rurales con tierras dedicadas a la producción agrícola y ganadera o a la industrialización de alguno de estos. En todas ellas destacan dos factores propios de las construcciones vernáculas: la adecuación al medio físico y la vinculación a la economía que lo sustenta.

Las primeras haciendas se formaron en torno a los núcleos urbanos y se dedicaron a su abastecimiento, pero rápidamente se fueron ampliando con la introducción de cultivos importados como la caña de azúcar, el café, el olivo y los cítricos y el aprovechamiento de los locales como el tabaco, el cacao y otros con criterios mercantilistas.

La particularidad fundamental era haber acumulado caballerías de tierra, sitios de ganado mayor y menor, donde laboraban esclavos negros y mulatos; peones indios, mestizos y pardos, generalmente arraigados en las fincas, por las deudas contraídas con los patrones. Las haciendas se llegaron a convertir en núcleos suburbanos autosuficientes, donde podían vivir la peonada y los patrones con todos los servicios necesarios.

Como característica arquitectónica principal es el carácter suntuario de las casas patronales construidas como villas distinguidas suburbanas que contrastaban con la pobreza de las rancherías, simples hileras de chozas donde se hacinaba una peonada miserable.

En Argentina a estos conjuntos se les conoce con el nombre de estancia y en Chile como fundo.